Ildefonso Gallego Asorey fue uno de los médicos gallegos más prestigiosos, apasionado por la radio y la lectura y profesor de Ciencias en el único instituto que, tras la Guerra Civil, se mantuvo abierto en Vigo. Fue el cuarto hijo de una familia de once hermanos, de los que Xosé dirigió la empresa Cross, tres fueron médicos y Francisco, un oftalmólogo de prestigio, realizó en 1944 el primer transplante de córnea que se realizó en España. Las mujeres, cinco, estudiaron todas Magisterio. Gallego Asorey fue un estudiante muy brillante. Ya en el Bachillerato obtuvo numerosas matrículas de honor, expediente sobresaliente que consigue mantener en la Facultad de Medicina de Santiago, donde estudia entre 1921 y 1927, consiguiendo once matrículas y seis sobresalientes. Acaba la licenciatura con la calificación de sobresaliente. En la Universidad Central prepara el doctorado a lo largo de dos años y luego completa sus estudios de la especialidad de otorrino en Barcelona, junto al eminente profesor Fernando Casadesus Castells. Hizo oposiciones a médico de la Marina Civil y durante una larga temporada navega en distintos barcos hasta que en 1930 aprueba la oposición a médico de Sanidad Militar. Al mismo tiempo se hace inspector de Higiene Municipal, obteniendo su primer destino en Marruecos, país donde se hace acreedor de la "Rossete d'officier de Ouisam Alaouite". El doctor Gallego Asorey acaba la Guerra Civil en Mataró. En la contienda participa en el bando republicano por encontrarse en Madrid en el momento de producirse el Alzamiento. Esto le supone la expulsión del Ejército cuando tenía el grado de capitán. Se casó con la catedrática Teresa Díaz Iglesias y se establece en Vigo en la década de los cuarenta. Fue profesor ayudante en la sección de Ciencias del único instituto que existía entonces en esta ciudad. Abre una clínica de consultas de otorrinolaringología, en la que le ayuda su único hijo, Alfonso. Al mismo tiempo ejerce como jefe clínico de la Seguridad Social. Este prestigioso doctor, fue un hombre de una extraordinaria cultura que dominaba el alemán, el inglés y el francés.