Se formó bajo la dirección de Vega y Verdugo en las obras de la basílica compostelana, encargándole éste las trazas de la fachada de la Quintana y del Tabernáculo. En 1673 trabajó en el coro de San Martín Pinario y al año siguiente empezó su obra maestra, el convento e iglesia de las Mercedarias de Santiago de Compostela (se terminó en 1689). En 1678 fue nombrado procurador general de Santiago. Otras obras suyas son: la Casa de las Pomas de la Rúa Nova (Santiago), obras en el Colegio de Fonseca y un "mascarón" en honor a María de Neoburgo por su visita a Santiago. En sus últimos años atendió las obras de la Cofradía de la Prima, como había prometido cuando lo habían nombrado cofrade.