Fue profesor universitario en las universidades de Rochester, Fordham, Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY) y en la Universidad del Estado de Nueva York (SUNY). Fue el fundador y director de programas culturales, sociales y educativos. Es conferenciante en gallego, español, inglés, italiano, francés, alemán y portugués. Es un defensor de los derechos de los inmigrantes y promotor del gallego como lengua oficial y lengua propia. Creó la teoria "Sociolingüística histórica" como base de tres temas universitarios: "El gallego, el inglés y el alemán, lenguas indoeuropeas", ‘Ingles universitario para Latinos’, English, a highly hybrid language’. Anima la investigación sobre "Paleohidronimia gallega".
Es autor de libros y artículos en gallego, español e inglés: ha publicado Terra Humida, Juventud Radical, Biliterate Immigrans/ Making Way in Lower Manhattan.
Fundó la 'Escuela en los Apartamentos', Solidaridad Humana, la Universidad del Barrio y la Casa del Pueblo.
“Escuela en los apartamentos”. Un proyecto solidario fundado en mayo de 1971, basado en un concepto novedoso en aquel momento, consistente en un programa formativo de convivencia entre estudiantes acomodados de la Universidad de la ciudad de Rochester (Nueva York) e inmigrantes marginales del Lower East Side de Manhattan mediante el cual, el alumnado universitario de Rochester impartía clases nocturnas de inglés a los jóvenes dominicanos, durante una estancia temporal de estudios en el Bajo Manhattan y a cambio, éstos les facilitaban hospedaje gratuito en sus apartamentos. Sus lemas educativos eran “La letra con música entra” y “Todos aprenden, todos enseñan”, y los instrumentos de trabajo consistían en una guitarra y las letras de canciones de, entre otros cantautores, Víctor Jara o Joan Manuel Serrat cantando a Antonio Machado, quien inspiró un tercer lema: “Se hace camino al andar/con luz y horizonte a la par”. “Eran tiempos de innovación con un profundo sentido de solidaridad, combinado con disciplina y mucha dedicación”, como manifestaba el propio Dino Pacio.
“La Escuela en los apartamentos” se llevó a cabo durante algo más de un año con un programa de alfabetización y educación básica, y en el verano de 1972 se añadió un programa técnico en colaboración con un Colegio comunitario de la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY), que aportó la tecnología necesaria y espacios comunitarios para desarrollar actividades, por lo que fueron disminuyendo las clases en los apartamentos.
En los Estados Unidos de América del Norte la legislación garantiza el derecho que tiene cada inmigrante a la alfabetización en su lengua materna, porque se ha demostrado que el uso exclusivo de la lengua nativa no garantiza el éxito. En ese sentido, se estaba intentando dar respuesta a las necesidades formativas de aquellos jóvenes hispanos que se veían perdidos en la selva neoyorkina, con la pobreza y el desarraigo cultural a cuestas.
“Solidaridad Humana. Comprehensive Lerning Center”. Pero la CUNY limitaba el período de estudios a dos años, por lo que se decidió presentarlo a la Universidad del Estado de Nueva York (SUNY) en 1977 con el nombre que empezaba a utilizarse ya por ese tiempo de “Solidaridad Humana”, definida como “reciprocidad responsable” y que el autor justificaba consciente de “vivir ya en una etapa histórica nueva”.
Aquel germen de institución educativa que nació como resultado de la “Escuela en los apartamentos” había crecido y se acabó consolidando como “Solidaridad Humana”, con una estructura más institucional y organizada en el nº 107 de Suffolk Street, un edificio de estilo neogótico holandés construido en 1897 que ya había albergado un antiguo colegio público, cedido ahora por el Ayuntamiento de NY para el proyecto. En ese espacio, la SUNY creó una extension bilingue en 1977. Allí cuenta Dino Pacio con el apoyo de sus alumnos universitarios como monitores, con profesores y tutores y con un local propio. Y en 1983, este educador fue nombrado profesor y director del programa bilingüe de SUNY en el Bajo Manhattan.
“Solidaridad Humana” se había convertido en una “organización de servicios humanos y educación comunitaria” para desarrollar un programa de educación bilingüe integral que velaba por los derechos humanos, culturales y educativos de los inmigrantes y de las minorías en general radicadas en zonas marginales del Bajo Manhattan. En este entorno, el contacto personalizado con la inmigración dominicana, junto a una justa evaluación de sus conocimientos previos, rompían con el método tradicional y contribuían decisivamente al éxito de la intervención. “Les enseñábamos en sus propias casas, en la mesa donde comían, en el hogar lleno de calor familiar. Enseñábamos y aprendíamos. Queríamos sentir la educación desde dentro del pueblo. Nacimos sin fondos, sin respaldo de personas e instituciones importantes. Sin cobrar, sin imponer. Partíamos de la misma experiencia del pueblo emigrante… sabíamos de sus problemas sociales, de sus problemas de idiomas, de conservar la cultura… para mantener la identidad latino-americana y ser al tiempo biculturales… fue un encuentro entre trabajadores y universitarios”, explicó en alguna ocasión Dino Pacio.
“Solidaridad Humana” pudo mantenerse durante nueve años sin subvenciones públicas. Las primeras llegaron en 1980. En 1981 se había convertido en un centro de educación de adultos donde se impartían clases desde los niveles más básicos hasta los universitarios en el que participaban alrededor de 2000 personas, en su mayoría estudiantes inmigrantes procedentes de 12 países, de entre veinte y treinta años. La fórmula pedagógica, en cierto punto subversiva, partía del principio de que educar es actuar colectivamente para transformar la conciencia sociocultural del mundo. El apoyo de la SUNY con fondos estatales permitió impartir estudios para grados de cuatro cursos, y así se pudo preparar a cientos de maestros bilingües de procedencia inmigrante, con destino a las escuelas públicas de la ciudad de Nueva York.
Sin embargo, Solidaridad Humana, un programa universitario exitoso, en colaboración con la SUNY, dirigido por un gallego de A Pastoriza, vio con impotencia cómo con la llegada de Ronald Reagan a la presidencia de los Estados Unidos, en enero de 1981, y en los primeros diez días de su mandato se suprimieron todos los fondos para miles de programas sociales comunitarios, especialmente los bilingües. En mayo de ese año se estableció el programa federal “English only”, aunque jamás fue aprobado por el Congreso, haciendo un daño irreversible a la política social de alfabetización bilingüe para inmigrantes. A pesar de los recortes y de la precariedad a partir de ese momento, Dino Pacio siguió ejerciendo como profesor del programa bilingüe de la SUNY hasta el año 2000, fecha de su jubilación. Durante ese tiempo compatibilizó la dedicación a “Solidaridad Humana” con su labor como terapeuta en la rehabilitación de adictos a la heroina y su puesto de profesor en la Universidad.
- Premio Nacional de Servicio a la Comunidad, otorgado en 1980 por la National Association of Community Colleges.
- Premio Trilingual Authors concedido en 1980.
- Premio Dissemination, concedido en 1981 por el Fondo para la Mejora de la Enseñanza Superior de los Estados Unidos no solo para “resaltar los valores educativos de Solidaridad Humana, sino también la visión y el genio educador de sus directores y en especial de Dino Pacio”.
Colaboró en la creación de la galería de arte "Cuchifritos" en el mercado central de Loisaida.
Escribió un himno anti-taurino en gallego y en inglés. En él escribió en 1975: "Debaixo das bretemas / non pastan os touros do xogo da morte / pastan as cuxas do xugo / as cuxas do xugo da vida".
Aunque está lejos de Galicia desde el 1 de julio de 1966, se sigue sintiendo de aquí.