Cuando tenía 14 años se marchó de su pueblo. Primero sirvió de criada en Santiago y luego se marchó a París, donde se hace famosa por su belleza y por su facilidad para bailar y cantar. Después realizó varias giras por Europa y América, llegando a actuar en Rusia. La I Guerra Mundial pone fin a su carrera artística, retirándose en Niza, cuya proximidad a los casinos la va conduciendo a la ruina. Al morir dejó todos sus bienes, muy escasos, a su pueblo natal.